Una ballena decidió nadar hasta que el mar se acabara. Nadó durante días y semanas. Al pasar por uno de los polos el agua se congeló y quedó atrapada. Cuando se derritan los hielos quizá pueda continuar su viaje. Aqui está la ballena, muy contenta el día de su partida. A ver si os gusta!
3 comentarios:
Una enorme sonrisa como la de la ballena. Y con eso del calentamiento global, cualquier día podemos ver a la ballena.
que no la veamos!
pero aunque al leerlo parece pesimista, la ballena parece feliz de verdad!
A mi también me parece feliz!! Yo quiero aprender de esta ballena que conserva su gran sonrisa en las dificultades!!!
Faty
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